ALTRUISMO

Se pone de escudo al débil.

Cuando nos llevan a lo más profundo de nuestro espíritu, todos decimos que trabajamos por el bien común y el desarrollo de la población.

Que los docentes queremos educar a los niños para que crezcan con determinada sabiduría para ser mejores ciudadanos; que los trabajadores del campo trabajan la tierra o los animales para alimentar a la población; que el gobierno busca y ofrece los medios necesarios para que los habitantes del país se desarrollen y progresen, progresando así la nación toda; que los sindicalistas responden gratuitamente a sus devotos trabajadores para lograr mejores condiciones de trabajo. Y los que no están al mando de gobiernos o sindicatos, critican al oficialismo y aseguran apasionadamente que cuando ellos estén las cosas serán mucho mejores.

De repente somos todos altruistas y nos encanta vivir en sociedad.

Pero, cuando nos llevan a lo más profundo de nuestro bolsillo, los docentes ponemos de escudo a los niños; los trabajadores del campo ponen de escudo a “sus alimentados”; el gobierno pone de escudo a los medios que utiliza la población para desenvolverse; los sindicatos mandan al frente a sus fieles; los que no gobiernan se escudan en que tendrían que haberlos elegido a ellos.

Y la población en que nadie votó a este gobierno.

De repente somos todos egoístas y ponemos de escudo al débil para que reciba el impacto negativo mayor.

Prof. Jorge R. Diez